Cuando hablamos de literatura infantil, no solo hablamos de la lectura y de los libros, que, evidentemente, también forman parte ella, sino que engloba todas las actividades que tienen que ver con dicho tema:
- Contar un cuento a nuestros hijos.
- Hablar de los personajes.
- Crear historias.
- Representar una obra y disfrazarnos.
- Marionetas.
- Tradición cultural: cuentos que pasan de madres a hijos de generación en generación...
Y la importancia de todo este tipo de actividades es crucial para el desarrollo del niño, ya que afecta en todos los sentidos.
¿Cuáles son los beneficios del fomento de la literatura infantil?:
- Cuando los padres leen o cuentan historias a los hijos, se crea un vínculo de unión especial: el apego.
- El niño aprende a escuchar y a estar atento a determinados estímulos: ya sea de palabra o de imagen, al acompañarla con un cuento o dibujos, por lo que aumenta su capacidad de atención y observación.
- Aumenta el vocabulario en el niño y la estructuración del lenguaje.
- Fomenta determinados valores que queramos trabajar de forma específica: ya que hoy en día existen infinidad de bibliotecas que trabajan distintos sentimientos, actitudes, valores, situaciones...que podemos elegir teniendo el cuenta el momento por el que están pasando nuestros hijos, lo que nos ayuda también a resolver y prevenir conflictos, y a tratar ciertos temas delicados.
- Desarrolla la imaginación.
- Desarrolla el pensamiento lógico: haciendo que el niño sea capaz de prevenir actuaciones a determinadas situaciones y resolviendo problemas que surjan en la historia.
- El niño se anticipa al final de la historia creando en su mente diferentes finales que desarrollan también su creatividad.
- Desarrolla las habilidades sociales: ya que se aprenden normas de comportamiento y formas de relación de unas personas con otras.
- Aprende las características del entorno cercano, y de las sociedades y medios más lejanos, dependiendo de la temática del cuento y el paisaje: el mercado, la escuela, en una aldea de áfrica...la playa....enriqueciendo su mundo natural y social.
- Aprende a crear personajes e historias ficticias que desembocan en la creación del juego simbólico y de roles, fundamental para el desarrollo cognitivo y emocional.
- El niño se divierte y le crea una sensación de alegría y felicidad.
- Ayuda también a crear rutinas: leer un cuanto antes de dormir, o después de comer...crea situaciones de relax y tranquilidad.
- Adquiere conceptos y conocimientos nuevos: evidentemente tiene una función cultural de aprendizaje, lo que fomenta también su curiosidad y sus ganas de saber.
- Y muchos más...
Nunca debemos olvidar que, además, los niños, aprenden por imitación, y, si están familiarizados con un ambiente de hábito de lectura en casa, de seguro que ellos también cogerán sus libros y se pondrán a leer, porque les gusta copiar todo lo que hacen sus papá
s!!
Así que, desde aquí os aconsejo:
- Jugad a crear historias con vuestros hijos.
- Leed, leed y leed!.
- Ofreced a vuestros hijos todo tipo de literatura: cuentos, libros de conceptos (animales, plantas...), revistas, folletos...para que se familiaricen con todo tipo de textos.
- No importa la edad de los niños, leedles un cuento!
- Compartid la lectura con ellos y leed un cuento entre los dos, o tres, o cuatro...toda la familia!!
Es la mejor manera de estimularles y enriquecerles!